Una de las lesiones más comunes en un accidente de tráfico es el esguince cervical, también llamado latigazo cervical. Tanto es así que, de hecho, los accidentes de tráfico se encuentran entre las causas más frecuentes de esguince cervical. Es por tanto un tema de gran interés, según la temática de la que trata de este blog. A continuación diremos algunas palabras sobre esta lesión, explicaremos brevemente cómo se produce y cuáles su síntomas, para, finalmente, dedicar unas palabras a sus peculiaridades a la hora de cursar una reclamación por esguince cervical.
1. ¿Cómo se produce el esguince cervical?
Como hemos dicho ya, una de las causas principales del esguince o latigazo cervical es el accidente de tráfico. Esto se debe a la particular posición en la que se encuentran los ocupantes del vehículo, por un lado, y a que gran parte de los accidentes de tráfico son colisiones entre vehículos. Precisamente, la colisión entre vehículos hace que la cabeza se mueva de forma repentina, hacia adelante (hiperflexión), hacia atrás (hiperextensión) o ambas cosas. Al llevar puesto el cinturón de seguridad solo se mueve el cuello, así que, en cierto modo, cambiamos el grave daño que produciría el no llevar puesto el cinturón, por esta lesión menos grave.
2. Síntomas y peculiaridades para cursar una reclamación por esguince cervical
Los síntomas que presenta esta lesión son variados. Entre estos nos podemos encontrar con dolores cervicales, de brazos, manos y hombros, una disminución de la movilidad del cuello, hormigueos en las manos, dolor de cabeza, vértigo y mareos. El problema que tienen estos síntomas es que no aparecen al momento, como podría ocurrir con esguinces en otras zonas del cuerpo, sino que pueden aparecer tanto en pocos días, como en meses.
Y es aquí donde nos metemos en las peculiaridades de esta lesión a la hora de cursar una reclamación por esguince cervical. En efecto, cuando suframos un accidente de tráfico, deberemos acudir al servicio de urgencias más cercano, pues si hemos sufrido una colisión con otro vehículo nada garantiza que no hayamos sufrido un esguince cervical, ni siquiera la ausencia de dolor. Además, esto es sumamente importante, dados los plazos existentes para la presentación de reclamaciones.